Es cierto que a veces no tenemos acceso a la Realidad y quedamos atrapados dentro de nuestro propio universo mental.
La sabiduría antigua revela que nuestra ignorancia influye en la apreciación de la existencia material.
Un universo mental estrecho condujo a una falsa ideología; considerar que el cielo es un lugar ideal y el suelo una cuestión 'terrenal', despreciable y hasta demoníaca.
Esta mentalidad dió origen a los monstruos, vampiros y demonios de todas clases.
La filosofía que nos sustente dará las características esenciales de cada uno, sus motivaciones, el nivel de su potencial, la influencia que va a tener sobre los demás.
Para "ver" la Realidad se aconseja claramente renunciar a uno mismo, a la ignorancia, al fanatismo, y adoptar el camino de la bondad pura, hasta adquirir la capacidad de superarse, porque es terrible adquirir conocimiento-poder sin haber adquirido humildad.
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